domingo, 27 de junio de 2010

DIARIO DE EL HOMBRE QUE OLVIDÓ SU NOMBRE Capítulo II: Mundoalrevés

Una de las canciones de este disco que mejor refleja la energía y la actitud con las que hemos ensayado durante estos meses es Mundoalrevés. Con ella  hemos querido recordarnos que ante todo nunca podíamos dejar de tomarnos el proceso como un juego cuyas reglas podían ir cambiando conforme cambiaban nuestras sensaciones y no al revés. Tampoco nos parece mala idea aplicarlo a la vida en general pero no siempre se acuerda uno de ello. Para eso, para que no se nos olvide surgió esta canción. Aquí tenéis un extracto de los días en los que Mundoalrevés se unió a nosotros.



miércoles, 23 de junio de 2010

DIARIO DE EL HOMBRE QUE OLVIDÓ SU NOMBRE: Visita de amigos

A final del verano de 2009, mientras terminábamos los ensayos, recibimos la visita de David Otero (El Pescao) y Juanín (Ewan). Esos días estuvimos preparando la canción El grito de mi generación. Aquí os dejamos unas fotos que nos hizo Pablo Zamora del encuentro surfero en Langre, una playa alucinante de Cantabria. 







domingo, 20 de junio de 2010

DIARIO DE EL HOMBRE QUE OLVIDÓ SU NOMBRE Capítulo I: Escapar de la ciudad

...pero lo que sí teníamos claro era que teníamos que escapar de la ciudad. Necesitábamos encontrar un lugar donde volver a conectar con nuestra creatividad, donde reducir los estímulos exteriores que nos llegaban y que hacía tiempo venían distrayéndonos de lo que realmente nos importaba.  Detrás del bosque de Loredo, en Cantabria, instalamos nuestro campamento. Allí, desprovistos de ruido y velocidad, comenzaron los primeros ensayos. En ese lugar nos dimos cuenta de que por fin teníamos delante las condiciones para encontrarnos con un disco distinto. 

Para finales del verano del 2009 quedó claro que teníamos entre manos un material musical cargado de una energía especial. Los ensayos y las grabaciones lo confirmaban. Pero a pesar de la distancia y el aislamiento aún nos quitaba el sueño una vieja preocupación: la discográfica con la que todavía nos unía un contrato legal no parecía mostrar el mismo entusiasmo por el proyecto: no conseguíamos respuesta de ningún tipo cuando les hacíamos llegar nuestras maquetas y pensar en publicar otro disco más siendo los únicos defensores del proyecto era algo descorazonador. 

Por fin, pedimos libertad legal para continuar trabajando por nuestra cuenta. Al día siguiente éramos libres. Aquel era el último paso que necesitábamos dar para disfrutar de la producción de este disco, y lo acabábamos de hacer.  La misma noche, durante un paseo nocturno por el bosque llegaron a mí las primeras melodías de "Puedo", una de las  muchas canciones de El hombre que olvidó su nombre que han surgido atravesando el bosque, la playa, las dunas o los acantilados.  

Fácil ver en este caso cuál fue la fuente de inspiración...


lunes, 14 de junio de 2010

CACAHUETE

Hoy nos ha dicho adiós nuestro amigo Cacahuete. Muchos escenarios quedan llenos de su vitalidad y su amor por la música.  Queremos despedirnos de él con esta canción. Muchas gracias Cacahuete por un concierto en la Caracol que ya nunca se nos olvidará. Buen viaje!

ÉRASE UNA VEZ UN HOMBRE QUE OLVIDÓ SU NOMBRE

Cada vez hay más gente que decide dar el paso hacia una vida más sencilla. Donde el progreso no imponga sus daños colaterales en cada uno de nuestros actos. Donde poder desarrollar una sensibilidad que centre nuestra atención en algo más que nosotros mismos, nuestra imagen, nuestra ropa, nuestro coche, nuestra casa, nuestras metas, nuestra cultura, nuestras neurosis… Allí donde los estímulos provocan a los sentidos y te invitan a bucear en un Pandora que no está tan lejos ni existe solo en un futuro ficticio. Hay quien piensa que somos nosotros los que vivimos alejados de nuestro entorno y de nuestro presente: obsesionados con metas futuras que nos hacen hipotecar la experiencia de sentir el instante que nos rodea.

…El hombre que olvidó su nombre no supo ver a tiempo que nada de lo que poseía lo acompañaba. Se esforzó mucho en construir un entorno que le impidiera sentir su soledad. Llegó a confundir la realidad consigo mismo y a creer que la infinitud del mundo se reducía a su limitada experiencia.

Consiguió estatus, poder y dinero para que su pequeño mundo pareciera grande y hermoso. Y aunque de vez en cuando aparecía la sensación de que aquello era demasiado frío y solitario, no tardaba en disiparla pensando en lo afortunado que era por tener tantas cosas en un mundo donde había tanta pobreza.

Los esfuerzos que realizaba para seguir disfrutando de esa suerte eran cada vez mayores. Primero tuvo que renunciar al tiempo que dedicaba a sus amigos más lejanos. Con los años, dejó de ver incluso a los íntimos. Pero aún tenía a su familia, a la que con esfuerzo podía dar cada vez más cosas. Al fin y al cabo no podía quejarse porque tenía de todo en un mundo donde había tanta pobreza.

Con el paso de los años llegó a lo más alto: más éxito, más poder, más dinero. Consiguió todo menos una cosa: tiempo. Cuanto más solo estaba, más se esforzaba por mantener su pequeño universo en pie, y se animaba pensando en lo afortunado que era teniendo tanto en un mundo en el que había tanta pobreza.

Un día, sin darse cuenta, distraído en su mundo de abundancia estéril, se convirtíó en el hombre que olvidó su nombre; aquél que no sentía lo que no compraba y que cuando tuvo todo, no sintió ya nada...

Cada vez hay más gente que decide dar el paso hacia una vida más sencilla. Gente que escapa de la autopista del progreso para avanzar despacio por el sendero del instante.  Una vez me crucé con uno de ellos y le pregunté:

-¿Cómo te diste cuenta?, ¿cómo puede uno despertarse?

A lo que respondió:

- Pandora está a tu alcance; la tienes ahí delante.

ADELANTO...

Saludos a todos:

Aquí os dejamos un adelanto de la canción que da nombre a nuestro próximo disco: El hombre que olvidó su nombre. Dado que todavía estamos mezclando el disco, lo que vais a escuchar es solo una versión de la maqueta. A ver qué os parece...

domingo, 6 de junio de 2010

EL HOMBRE QUE OLVIDÓ SU NOMBRE - Nuevo disco de La sonrisa de Julia

Al terminar la grabación de Bipolar , tras diez años viviendo en Madrid, decidimos ubicarnos cada uno en lugares distintos. Hemos seguido trabajando juntos reuniéndonos en una casa en Cantabria alejada de prisas, urbe y ruido, donde preparamos la gira del año pasado y en la que se ha gestado nuestro próximo disco. 

Hace aproximadamente un año comenzamos a grabar las primeras maquetas. Tras meses de ensayos y grabaciones (meses en los que conseguimos que Universal nos diera libertad para seguir nuestro propio camino) recibimos la llamada del productor Nigel Walker. Aceptamos su ofrecimiento de producir este disco como el lujo de poder aprender de uno de los mas grandes. En noviembre de 2009 se sumó a nuestro equipo pasando inolvidables días en tierras cántabras. 

Para el 1 de febrero nos encontrábamos en Madrid grabando las primeras tomas del disco. Dos semanas después nos trasladamos a Asturias para seguir grabando más tranquilos. La idea era terminar la grabación a principios de marzo pero finalmente hemos estado inmersos en el estudio hasta junio. Ahora mismo solo falta terminar las mezclas y algunos detalles. 

Han sido más de cuatro meses de sesiones; es la primera vez que hemos podido trabajar en un estudio sin ninguna prisa dando el tiempo necesario a cada canción para conseguir en el estudio la energía de nuestro directo. Este privilegio se lo debemos a nuestro manager que apostó por este proyecto sin dudarlo. Gracias Íñigo!!!

El resultado es El hombre que olvidó su nombre, nuestro cuarto disco, que verá la luz tras el verano. Otra de las buenas noticias es que vamos a tener el apoyo de Warner Music, compañía con la cuál hemos firmado contrato por cuatro discos y con la que ya estamos trabajando. 

No podemos disimular nuestro entusiasmo y nos morimos de ganas de empezar a ensayar para lo que creemos que será una gira inolvidable porque este disco tiene una energía brutal. Además, anunciaros que este año tenemos un componente más que compartirá escenario con nosotros... Promete mucho, pero todo a su tiempo. 

De momento vamos a publicar un blog donde iremos compartiendo el diario de la experiencia que ha supuesto para nosotros este disco. Tenemos muchísimo material de ensayos, sesiones de estudio, sesiones de fotos, etc, para que vayáis entrado poco a poco en el mundo de El hombre que olvidó su nombre... 

Muchas gracias a todos por el apoyo y la buena energía que nos habéis transmitido en todo este tiempo. A pesar de que hemos estado desaparecidos durante meses no hemos dejado de recibir vuestros mensajes y no os hacéis idea de lo que supone para nosotros ver cómo el "Ejército de la Sonrisa" crece y crece. No es fácil seguir haciendo discos en los tiempos que corren y se agradece mucho saber que seguís ahí.

Hasta muy pronto!

Diego, Raúl y Marcos